Lo vi sonreír, me acople en una silla, a la espera de
explicaciones, visualice que mis cosas, bolso y demás, estaban encima de una
mesa casi a mi lado, más que nada por si tenía que salir por patas;
-estoy esperado una explicación, no me des una excusa para
salir corriendo de aquí.- dije mientras cruzada los brazos y las piernas.
-no deberías marcharte de aquí, sin darme cuenta te he
puesto en peligro.- mientras hablaba se frotaba la cara frustrado.
-¿en peligro, cómo? ¿Porque? ¿Quién nos disparó?-no
contestaba a mis preguntas, se limitaba a mirarme.- Me voy de aquí, estás
loco.- me estaba poniendo las manoletinas y cogiendo mi bolso, cuando vi que se
levantaba y se ponía delante de mí.
-no puedes marcharte.- dijo quitándome el bolso de las manos.
-¿y eso lo dices tú? Suéltame me voy, no sé qué tipo de vida
tienes, yo soy una persona normal que vive de su trabajo y tú ahora mismo, me
estas involucrando en algo que no me gusta ¡¡ me han disparado!! Seria a ti,
pero iba contigo, no te conozco de nada y no quiero saber nada de tu vida de
mierda, dame mi bolso y déjame salir de aquí o llamo a la policía.-era como
hablar a la pared.
Me dirigí a la mesilla que había junto a la cama y descolgué
el teléfono, me lo quito de la mano con brusquedad, intente quitármelo de encima,
me parecía todo tan surrealista, lo tenía de frente a mi agarrándome los
brazos, he hice la intención de pegarle una patada en sus partes, pero fue más rápido,
me hizo girar sobre mi misma, mi pecho contra su espalda y agarrándome con
fuerza;
-soy un testigo protegido.- moví la cabeza intentando
asimilar lo que me había dicho.- te voy a soltar ¿serás capaz de escucharme unos minutos? Luego
decides si te quieres marchar.
-me marchare de todas formas, pero puedes explicarte si
quieres.-volví a sentarme, con los brazos cruzados y el cuerpo rígido.
-fui testigo de una asesinato, hace un par de años, no puedo
entrar en demasiados detalles, por tu bien contra mas sepas, mayor será el
peligro para ti, solo te diré que mi novia estaba presente, ella no quiso
entrar en el programa y la mataron.
-¿y que pinto yo en todo esto? no quiero saber más.- dije volviéndome
a levantar, creo que la persona que llevaba mi caso, ha sido comprada, y ha
informado de donde estoy, me di cuenta ayer de que me seguían, esta mañana
espere delante de la puerta de tu hotel y vi que te seguían a la estación…
-¿pero porque a mí?-poniendo cara de no entender nada.
-debieron de verte conmigo, estos últimos días, pensaran que
te he dicho algo, no lo sé, no pretendía meterte en esto, no sabía que me
vigilaban, ahora mismo no se ni en quien confiar.
-esto va en serio, no me lo puedo creer ¿y que pretendes que hagamos? ¿Qué me quede
contigo? ¿y si llamamos a la policía? Yo me vuelvo a Milán, todas mis cosas están
allí, me voy a la estación, una vez Milán
ya veré que hago, no estoy tan segura de que fueran también a por mí, si tu historia es cierta, claro.
La hora y media se me hizo eterna, y de camino al hotel,
observaba a todo el mundo que me parecía que miraba de un modo extraño. Al entrar
en la habitación, mi convicción se me cayó a los pies, todo estaba revuelto, mi maleta, busque en el bolsillo donde dejo el
pasaporte, ya no estaba, se habían llevado el portátil y mi pasaporte, recogí
algo de ropa, sin saber muy bien por qué y la metí en mi bolso, entre lágrimas,
vi mis bocetos hechos añicos por el suelo. ¿Qué iba hacer? Tendría que volver a
España cuanto antes, pero ahora ya sabían cómo me llamaba, no tardarían en
saber mi domicilio, abrí la puerta para salir de la habitación y me encontré de frente con Marcus, me hizo volver a entrar
al ver la habitación revuelta.
-me han robado el pasaporte y el portátil.- dije volviendo a
llorar.
Luna Soler
0 comentarios:
Publicar un comentario