Nos miramos durante años, tú desviabas la mirada, yo te
imitaba.
Hoy te saludo, mañana no…
Un día entablo conversación con naturalidad, tu tragas
saliva, yo me sorprendo, nos damos los teléfonos, te mensajeo banalidades, con
la ilusión de mover algo, tu no demuestras el menor interés.
Coincidimos, siempre con prisa o malestar por tener que
hablarme, me haces daño, saco mi orgullo.
No hay más mensajes y me alegro de no cruzarme contigo…
No entiendo tu soledad, pienso que alguien te hizo mucho
daño en el pasado.
Vuelve a pasar el tiempo.
Volvemos a coincidir, miradas directas, risueñas, se
encuentran con una cara femenina que se siente herida, menos preciada e
ilusionada por volver a ver esos ojos sinceros y esa sonrisa… pero vuelven a
pasar los días.
Moraleja:
Esta mierda, es lo que se consigue, cuando no tienes el
valor, de hablar de lo que sientes.
Luna Soler
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