-¿que
dices, te has vuelto loco? No puedo irme contigo, he luchado mucho
por mi puesto aquí, sé que hemos mantenido
en cierta manera una relación, durante estos dos años que hemos
trabajado en esta empresa, pero…
-yo
sé lo que siento por ti, lo tengo claro, recuerda que te estoy ofreciendo otro
puesto de trabajo igual o mejor que el que tienes, aquí ya no te quedan amigos,
esta empresa se ha vuelto una tiranía, eres un número.- se acercó más a ella agarrándola
suavemente de los brazos intento besarla, como había hecho otras veces, ella se
apartó levemente.
Recordó
las veces que había ido ella a su despacho destrozada emocionalmente por el
impresentable de su jefe. No podía creer que antepusiera la empresa y más ofreciéndole
otro trabajo, solo podía pensar que fuera miedo a fracasar, y a lo que sentía
por él, no quería reconocerlo, pero solo necesitaba mirarla a los ojos para ver
su desilusión y frustración.
-suerte.-
dijo besándola en la frente a pesar de su resistencia.- siempre estaré hay ¿lo
sabes verdad?
Asistió
con la cabeza, recogí mi portátil y la caja con mis cosas y salí de mi despacho,
dejándola inmóvil, incapaz de mirarme marchar.
Había
pasado solo una semana ¿en qué momento había pasado a ser tan dependiente de él?
de lo que pensara, de sus abrazos, de sus besos reconfortantes en el sofá de su
casa, después de que escuchara, la última estupidez de mi jefe, como no me di
cuenta, lo echaba tanto de menos…
No
habíamos hablado desde que se marchó, había desaparecido por completo,
volvieron aparecer las lágrimas, la presión que sentía en el pecho, me decía que
no solo le echaba de menos, me acaba de dar cuenta de que estaba enamorada de él
Un
breve vistazo a la ventana, me hizo ver que la gente empezaba a llegar a la
oficina, terminaba mi momento de soledad
intima.
Abrí
la agenda para apuntar lo que tenía que hacer hoy y encontré una nota escrita a
mano que ocupaba prácticamente la mitad de la hoja, reconocí la letra de
inmediato;
Si no puedo tocarte, besarte, mejor te
sueño…
Aunque preferiría que estuvieras aquí,
yo te sigo esperando.
-Ana,
por favor páseme con el departamento de RRHH.- cerré la agenda y la guarde en
mi bolso.
-si
ahora mismo.
-recursos
humanos, dígame.
-prepárenme
el finiquito causo baja en la empresa con fecha de mañana.
Luna Soler
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