Cuando te
domina un deseo profundo, que sin saber
porque no llega, una situación que se te escapa de las manos, haciéndote fruncir
el ceño, porque no sabes cuándo te equivocaste.
Cuando esa
situación se repite con frecuencia, resulta tranquilizador darte cuenta, que
con el paso del tiempo y el acumular experiencias, tu mente cada vez dedica
menos tiempo a pensar en ello, pasa el borrador y abre la ventana.
Sigue engullendonos con tus historias.
ResponderEliminarEn el mar,en el parque........
Dnd quieras pero no dejes de hacerlo